Septiembre es época de comienzos. Solemos venir con las pilas cargadas y, por tanto, más predispuestos a emprender o reemprender algunos proyectos. Uno de ellos puede ser algo que probablemente lleves aplazando mucho tiempo: efectivamente, organizar el trastero (música de Psicosis). Sí, estamos de acuerdo en que da mucha, muchísima, pereza, pero es algo que hay que hacer antes de que el trastero o la buhardilla parezca el escenario de un futuro postapocalíptico, si no lo es ya. Aquí van algunos consejos que pueden servirte de ayuda a la hora de organizar el tuyo:
Hacer una lista o inventario
Como probablemente ya sepas a estas alturas, cuando se almacenan muchos artículos, es difícil (y en algunos casos imposible) recordarlos todos. Si bien los objetos grandes son más visibles y fáciles de recordar, con los pequeños ocurre todo lo contrario: ni se ven fácilmente ni recordamos que los tenemos. Por lo tanto, lo ideal es hacer una lista o inventario con todo lo que tienes y/o vayas guardando en el trastero. Si como es normal, ya tienes muchas cosas almacenadas, es el momento de sacarlas una a una para apuntarlas y hacer lo indicado en los consejos siguientes.
Pregúntate (de verdad) si vas a volver a usarlo
Normalmente nos cuesta mucho desprendernos de algunas cosas que, siendo realistas, no vamos a volver a usar en la vida. Puedes pensarlo y replantearlo de mil y una formas, pero hay una regla que no suele fallar: si no lo has usado en los dos últimos años, lo más probable (al 99,9%) es que no vuelvas a usarlo. Puedes dividir este tipo de cosas en tres grupos: para vender (ya sabes: si no lo usas, Wallapop), para regalar (hay infinidad de asociaciones benéficas que a buen seguro lo agradecerán) o para tirar. Tú decides.
Cajas transparentes mejor que cajas de cartón
Las cajas de cartón están bien para guardar cosas. Tanto, que se han usado toda la vida para ello. Además, suelen ser muy baratas, o directamente gratis si usamos aquellas que en su día sirvieron como embalaje de zapatos, electrodomésticos, etc. Sin embargo, las cajas de plástico transparentes que podemos encontrar en cualquier bazar de artículos para el hogar son mucho más recomendables que las de cartón, ya que, además de ser más resistentes, permiten ver lo que hay en su interior sin necesidad de abrirlas y escarbar entre ellas cada vez. La diferencia de precio sin duda vale la pena. También puedes aprovechar el espacio que te ofrecen algunos muebles de almacenaje, si dispones tienes alguno por casa, sobre todo para guardar las cosas más delicadas y resguardarlas de polvo y humedades, a la larga lo agradecerás.
Etiquétalo todo
Está infravalorada la importancia que tiene etiquetar cada caja. Pensamos que nos acordaremos de todo lo que guardamos en cada una de ellas, pero obviamente es imposible, sobre todo si lo almacenamos durante largos periodos de tiempo. Así que no lo dudes, coge un rotulador permanente y un buen grapado de etiquetas, y apunta claramente a qué corresponde cada caja (por ejemplo: "libros de Javi", "ropa de invierno" "juguetes de Blanca", etc.). Eso sí, asegúrate de dejar la parte etiquetada/rotulada de la caja mirando hacia la entrada del trastero para poder identificar la caja sin tener que cogerla.
Los artículos grandes, al fondo y en vertical
Para optimizar el espacio disponible en el trastero, lo recomendable es colocar los objetos grandes y pesados en el fondo del trastero y en vertical, de tal forma que no entorpezcan el paso y no aplasten otros objetos o cajas más pequeños. Esto es especialmente importante en caso de muebles auxiliares, cabeceros, colchones, etc. Diferente es el caso de las mesas, que las podemos usar como estante adicional para apoyar otros objetos.
Las cosas que necesites con más frecuencia, delante de todo
Lo más probable es que haya algunas cosas que necesites usar con bastante más frecuencia que otras. Es el caso, por ejemplo, de ropa de temporada (ojo, no antigua, ropa de temporada que uses sí o sí): abrigos, chanclas, botas, etc. que, si bien no utilizas todos los días, sí necesitarás sacarlas al menos una vez al año. Lo recomendable en este caso es que, siempre que no sean exageradamente voluminosas, las coloques lo más adelante y cerca de la puerta que sea posible.
Guarda siempre en vertical
Recuerda que lo ideal, en la medida de lo posible, es almacenar en vertical, apilando correctamente una caja encima de otra o de otros objetos más grandes, siempre que la 'columna' formada se mantenga estable. De lo contrario, si distribuyes las cosas en horizontal, habrá un momento en que no podrás meter un pie en el trastero ni acceder a la mitad de tus cosas. En este sentido, una pequeña escalera te facilitará mucho la vida.
¿Te animas a organizar de una vez el trastero?