Bancos tapizados, acolchados o recubiertos para decorar el comedor, la habitación o la entrada. Un banco tapizado quedará bien en cualquier lugar de la casa.
Bancos tapizados diseñados con mucho estilo para decorar la entrada de casa, el salón comedor o, por supuesto, el pie de cama del dormitorio. Todos ellos ideales para sentarte con más comodidad que en otros bancos sin recubrimiento o relleno. Los bancos tapizados son un elemento muy fácil de integrar en cualquier estancia, y perfectamente capaces de resistir el paso del tiempo sin pasar de moda. Además, puedes encontrarlos en diferentes materiales, formas, colores y acabados. Dependiendo de tus necesidades y el espacio que vaya a ocupar, elige tu banco tapizado teniendo en cuenta el resto de la decoración. Por ejemplo, en una habitación de estilo romántico un banco con patas isabelinas es tal vez la alternativa ideal como pie de cama. Del mismo modo que en una habitación colonial, un banco de madera con asiento tapizado en blanco puede resultar todo un acierto.
Pero sin olvidar nunca la posibilidad de colocar un banco tapizado en una decoración que no necesariamente sea de su estilo para conseguir la tan deseada ambientación ecléctica, que como sabes, consiste en mezclar con criterio y buen gusto piezas de diferentes estilos, una tendencia cada vez más de moda en el mundo del interiorismo. Además, un banco tapizado suele tener más posibilidades de integrarse con éxito en un ambiente al contar por lo general con un mínimo de dos colores. Buenos ejemplos de ello son los bancos tapizados de la colección Forest, acabada principalmente en nogal, o de la serie Amber, de aire más rústico.
