Genuinas piezas que destacan por su gran versatilidad.
Probablemente ya te habrás dado cuenta de que los taburetes nórdicos están de moda. De hecho, es probable que precisamente por ello estés aquí. Y es que resulta ciertamente complicado resistirse a estas piezas tan coquetas y funcionales, taburetes la mar de bonitos, cada uno con sus particularidades, pero con algunos puntos en común, como son su apuesta principalmente por tonos claros (blanco, blanco roto, beige, gris, marrón claro, madera, etc.) o la presencia de patas pronunciadas e inclinadas.
Un taburete nórdico queda bien casi siempre, aunque es verdad en que luce especialmente bien en espacios diáfanos, ya que así son precisamente los ambientes escandinavos. Pero sus propiedades no son meramente decorativas u ornamentales, ni mucho menos. Estos taburetes son muy prácticos a la hora, por ejemplo, de calzarte o descalzarte en la entrada de casa. También son perfectos como asiento auxiliar en la cocina, en el salón-comedor, o incluso en la sala principal de un bar-restaurante. Puedes darle mil y un usos, tantos como marque tu imaginación, que al final es quien determina cualquier tipo de límite.
Lo que está claro es que un taburete nórdico es garantía de éxito, lo mires como lo mires. Raras veces defraudará una pieza tan versátil y elegante. En este apartado hemos visto conveniente recoger todos los taburetes nórdicos, daneses o escandinavos con los que contamos actualmente. Estamos seguros de que, entre todos ellos, encontrarás el más adecuado a tu casa o al ambiente que te dispongas a decorar. ¿Sabes ya cuál es el tuyo?