Sofá con patas de madera

Un sofá con patas de madera se presta a una gran variedad de posibilidades. De hecho, no hay más que ver la interesante gama de modelos que te ofrecemos a continuación. Sofás con patas de madera altas, bajas, rectas, inclinadas, torneadas…  Y, por supuesto, de diferentes tamaños, colores, diseños y estilos decorativos, ¡faltarías más! Porque casi cualquier ambiente es susceptible de acoger un bonito sofá de este tipo. En esta sección te proponemos unos cuantos, y entre todos ellos, estamos seguros de que encontrarás alguno que te guste y, sobre todo, que encaje a la perfección en el espacio en el que quieras colocarlo.

Sofá cama de terciopelo

Sofá cama de terciopelo

Medidas: 182 cm x84 cm x95 cm, Color: MOSTAZA, Material: , MADERA DE PINO, ESPUMA

949 € 798,40 €
Sofá terciopelo mid century

Sofá terciopelo mid century

Un precioso sofá modernista alzado sobre patas de madera.

Fantástico sofá de elegantes líneas rectas tapizado en un suave y bonito tejido de terciopelo en color beige y levantado sobre cinco patas de madera de pino que le ofrecen robustez.

1.118,60 € 941,10 €

Sofá con patas de madera: Más información

Sofás de estilo nórdico, danés, mid century, etc.

Si estás buscando un sofá con patas de madera, estás de enhorabuena, porque has llegado al mejor sitio posible. Y es que, dentro de nuestra sección de sofás, hemos creado una subcategoría específica de sofás con patas de madera, sean del tipo que sean tanto las patas (altas, bajas, torneadas, rectas, inclinadas, etc.) como el sofá en sí mismo (moderno, industrial, vintage, rústico, mid century, etc.).

Porque, sea como sea, resulta obvio los sofás que se alzan sobre unas patas de madera más o menos llamativas, tienen un toque de personalidad. Ya no se llevan (o se llevan menos) los sofás que se apoyan directamente sobre el suelo, ya que esto, además de poco estético a día de hoy, resulta poco funcional. No en vano, un sofá apoyado íntegramente sobre el suelo dejará en el piso una fea marca, por no hablar de los problemas que ello supone a la hora de limpiar el hogar.

En cambio, los sofás con pies de madera, como es lógico y normal, solo apoyan la superficie que ocupan sus patas y, en la mayoría de los casos, permiten pasar por debajo de su estructura la mopa, la escoba, la fregona o incluso el robot aspirador, con lo que esta zona deja de estar olvidada o vetada para la limpieza.

Y qué decir de su atractivo estético. Si estilos emergentes como el escandinavo y el mid century abogan por sofás con patas altas de madera, no seremos nosotros quien se los neguemos.